¿Necesitas paquetes quirúrgicos
de alto desempeño?
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Los paquetes quirúrgicos de uso único están diseñados para cada tipo de cirugía y ofrecen diferentes niveles de desempeño según la cantidad de fluidos esperados y la duración del procedimiento quirúrgico. Pueden ser clasificados como estándar, de desempeño medio y de alto desempeño.
Los paquetes quirúrgicos de «alto desempeño» pueden ayudar a resolver muchos de los problemas típicos de las instituciones de salud: elevados índices de infecciones en sitio quirúrgico, baja productividad, pérdida de tiempo, incapacidades y pérdidas.
En efecto, los atributos especiales de los paquetes quirúrgicos de alto rendimiento permiten controlar eficientemente un factor de alto riesgo en toda institución de salud: los fluidos contaminantes.
Y no es necesario invertir grandes cantidades de dinero para obtener esos beneficios.
Cuando utilizar paquetes quirúrgicos de alto desempeño
Pensemos en un equipo de profesionales de alto desempeño. Son contratados para trabajar en un asunto complejo y específico de la organización. Por ejemplo, imaginemos un equipo quirúrgico para trasplantes o un equipo de asesores para lograr la calificación internacional en calidad. La institución invierte en ellos esperando resultados acordes con sus altas capacidades. Así mismo, al adquirir un tomógrafo de última tecnología, todos esperan que cumpla las expectativas fijadas de acuerdo con sus atributos. Imágenes de alta resolución que permitan diagnósticos acertados. ¿Qué esperamos de un paquete quirúrgico de alto desempeño?
Algo similar.
De un paquete quirúrgico de alto desempeño se espera que, en cirugías muy exigentes por la técnica quirúrgica, la duración y/o el nivel de fluidos, los dispositivos controlen bien el alto riesgo biológico.
Los paquetes quirúrgicos de «alto desempeño» tienen campos y batas quirúrgicas con especificaciones cualificadas para controlar bien los fluidos contaminantes aún en cirugías de alta complejidad.
De acuerdo con las normas de bioseguridad, siempre es necesario controlar los líquidos de precaución universal. Sin embargo, no en todas las cirugías se presentan volúmenes iguales. Hay algunas, con una exigencia menor, que, por lo tanto, requieren niveles de desempeño acordes a los riesgos.
También, como bien lo sabemos, hay intervenciones en las que los profesionales de la salud estiman que podrían infectarse o que su paciente podría agravarse con una infección derivada de la cirugía:
En todos estos casos, es necesario aumentar la protección al paciente y a los profesionales de la salud durante el procedimiento para evitar al máximo un posible contacto con líquidos de precaución universal. Unas cuantas gotas de estos fluidos en una incisión, una pequeña herida en la piel, una solución de continuidad, podría fácilmente provocar una infección grave. De igual manera, es importante extender la disminución del riesgo al personal de otras áreas, tales como limpieza y desinfección, mantenimiento y gestión de residuos para prevenir infecciones asociadas a la atención sanitaria.
Atributos especiales de un paquete quirúrgico de alto desempeño
Básicamente, lo que diferencia a un paquete quirúrgico de nivel «estándar» de uno de «alto desempeño» es el material y las características de las batas y campos quirúrgicos.
Por ejemplo, para una osteosíntesis de una falange, se requieren batas y campo quirúrgico de un material repelente, capaz de controlar los líquidos durante un corto tiempo.
En cambio, para una cesárea en la que hay líquido amniótico, sangre y otros líquidos, las batas y campos quirúrgicos deben actuar como barreras capaces de controlar la abundante humedad, aunque se realicen fuertes maniobras. Así mismo, se requiere un alto rendimiento en el control de fluidos en cirugías mayores como la extracción de tumores cerebrales, correcciones de malformaciones en huesos, trasplantes de órganos o cirugías abdominales y de corazón.
En estos procedimientos se requieren batas y campos quirúrgicos que combinen el control de fluidos y otras cualidades especiales:
Entonces, el nivel de desempeño alto de batas y campos quirúrgicos depende de la forma en que el material puede controlar los fluidos y el tiempo en el que puede controlarlos.
Los paquetes quirúrgicos de alto desempeño están diseñados con base en la experiencia de los profesionales de la salud y criterios de costo efectividad. Por eso, es normal encontrar que en las batas y campos quirúrgicos se combinan los atributos repelente-impermeable-absorbente según la necesidad de control de fluidos para aumentar el desempeño sin incurrir en costos innecesarios. Así, se delimitan áreas no críticas y áreas críticas en las que no es necesario o sí es necesario aplicar refuerzos para mejorar la capacidad del material en la protección y prevención de infecciones.
Cómo evaluar el desempeño de un paquete quirúrgico de alto rendimiento
Las características que se deben evaluar en los paquetes quirúrgicos son, en primer lugar, la estructura del material y en segundo el contenido del paquete. Estas características son las que permiten mejorar la productividad y la rentabilidad del área de quirófanos.
Veamos:
Desde hace años sabemos que los materiales de uso único tienen un mejor comportamiento como barreras antimicrobianas y esto los hace muy apropiados para el trabajo en unidades sanitarias. Sin embargo, no todos los paquetes quirúrgicos que se consiguen en el mercado son de «alto desempeño». Para identificarlos es necesario realizar algunas evaluaciones:
¿Qué nivel de barrera tienen las batas y campos quirúrgicos?
¿Qué refuerzos tienen?
¿Son esos refuerzos los adecuados para esa técnica quirúrgica?
¿Cuáles son las medidas de los campos?
¿Cuánto mide el área crítica que tiene los refuerzos de impermeabilidad y/o absorbencia?
¿Tiene canales para evitar derrames sobre el paciente?
¿El campo tiene fenestraciones? ¿Cuántas?
¿En qué zonas tiene refuerzos la bata?
¿Son adecuadas para otorgar protección al equipo quirúrgico en esa cirugía?
¿Cómo se unen los distintos materiales en las batas y campos?
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¿Qué nivel de barrera tienen las batas y campos quirúrgicos?
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¿Qué refuerzos tienen?
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¿Son esos refuerzos los adecuados para esa técnica quirúrgica?
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¿Cuáles son las medidas de los campos?
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¿Cuánto mide el área crítica que tiene los refuerzos de impermeabilidad y/o absorbencia?
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¿Tiene canales para evitar derrames sobre el paciente?
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¿El campo tiene fenestraciones? ¿Cuántas?
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¿En qué zonas tiene refuerzos la bata?
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¿Son adecuadas para otorgar protección al equipo quirúrgico en esa cirugía?
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¿Cómo se unen los distintos materiales en las batas y campos?
Por regla general, un proveedor que especifique que sus paquetes quirúrgicos son de alto rendimiento aporta pruebas de laboratorio recientes para comprobar el nivel de resistencia a la humedad.
Lo recomendable, en todo caso y tratándose de un dispositivo médico, es verificar los registros sanitarios que se exigen en cada país que, para Colombia, son los del Invima, el Instituto Nacional de Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, y que comprueban la capacidad protectora de los paquetes quirúrgicos.
El segundo aspecto para evaluar es el contenido de los paquetes quirúrgicos. Los elementos del paquete determinan en buena parte el desempeño. Si el quirófano debe esperar por una sábana adicional, un tubo o una bolsa, el resultado será tiempo perdido. Un paquete quirúrgico debe incluir los dispositivos y elementos necesarios para proceder con la intervención rápidamente:
La institución podrá disponer de varias referencias de paquetes quirúrgicos de alto desempeño adecuados para la agenda de cirugías.
Resultados del uso de paquetes quirúrgicos de alto desempeño
Controlar bien los fluidos en las salas tiene impactos importantes en toda la institución. Es fácil visualizar que si se canalizan los fluidos o los campos logran absorber la humedad, los derrames en piso y camilla serán menores. Esto implicará menos tiempo en la limpieza y desinfección de la sala para el siguiente paciente. La reducción en el tiempo de preparación permite aumentar la productividad y, por ende, la rentabilidad.
Este no es el único efecto.
La central de esterilización tendrá más tiempo para cargas de instrumental y equipo en lugar de esterilizar sábanas, campos y batas; mantenimiento utilizará menos desinfectantes; el personal se sentirá más seguro en su trabajo; compras pedirá un paquete en lugar de 20 elementos a distintos proveedores, y las cuentas de gestión de residuos podrían disminuir.
Finalmente, la institución apreciará un cambio en los indicadores de infecciones en sitio quirúrgico que traerá beneficios económicos importantes, mayor satisfacción del equipo por su trabajo y una imagen de calidad en la comunidad.
Conclusión
Los paquetes quirúrgicos de alto desempeño están diseñados para controlar bien el nivel de fluidos en cirugías de alta complejidad. Se eligen dependiendo de la técnica quirúrgica, la duración y la cantidad de líquidos. Su uso genera impactos positivos y medibles en la institución: más cirugías, menos infecciones, menos incapacidades, más satisfacción del equipo médico y menos carga de trabajo en la central de esterilización, logística, compras y mantenimiento. Para ofrecer un alto desempeño, los paquetes deben incluir batas y campos quirúrgicos con combinación de tecnologías, impermeables o con refuerzos en áreas críticas para garantizar la seguridad de los pacientes y profesionales de la salud.
Por Katy Schuth B. – Redactora