Actualizado junio 13- 2023
Publicado noviembre 11 – 2020
¿Cómo mejorar la eficiencia en quirófanos?
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6 min
Los quirófanos implican un alto costo para un hospital. Exigen inversión en infraestructura, gasto en mantenimiento y contratar recurso humano especializado. Del número de cirugías que pueda realizar dependerán los resultados financieros, la posibilidad de subsidiar áreas poco rentables y la salud de la comunidad a la que está destinada a atender.
Por eso, la eficiencia de quirófanos es probablemente uno de los mayores retos de una institución de salud. Se espera entonces una alta eficiencia, que se debe medir en dinero y en tiempo. En quirófanos cada minuto cuenta.
Causales de ineficiencia
Lograr buenos resultados no siempre es fácil. Son muchos los factores que intervienen en el buen uso del tiempo de quirófanos.
Los jefes de quirófano deben planear y coordinar todos los factores que se requieren para que la cirugía se lleve a cabo, en el momento previsto, idealmente durante el tiempo estimado, y con un mínimo de riesgo para el paciente y los profesionales. Muchos de esos factores son externos a la institución y algunos pertenecen a otras áreas:
- Aprobación de la cirugía por el sistema de salud y/o aseguradora
- Estado de salud del paciente (gripe, virus, presión alta, etc.)
- Disponibilidad de camas de hospitalización
- Disponibilidad de UCI/UCE
- Inventario de dispositivos, medicamentos o insumos
- Disponibilidad de ropa quirúrgica
- Equipos esterilizados
Las esperas para poder realizar la cirugía y las cancelaciones de procedimientos por razones médicas parecen inevitables y deberían considerarse un acierto de calidad. Se trata de la seguridad del paciente. Sin embargo, las otras causas deberían poder ser evaluadas y medidas para emprender acciones correctivas que permitan un uso óptimo del quirófano.
Indicador de ocupación
En la industria de la salud se estima que un quirófano es eficiente cuando se usa el 80% del tiempo disponible. Es decir, si la jornada es de 10 horas, dos horas se deben destinar a actividades no asistenciales o a tiempos muertos:
Entonces, ¿cómo optimizar el uso de los quirófanos?
Maximizar el tiempo requiere de datos. Se debe poder conocer:
La fórmula para conocer el índice bruto de ocupación es:
Supongamos que se hizo la evaluación de un día en un hospital. Los resultados no agradaron al director de quirófanos:
Un indicador de 68% de uso muestra claramente una oportunidad de crecimiento. En ese caso, extremo pero posible, se utilizó mucho tiempo para el recambio y no se hicieron suficientes cirugías. El análisis exige respuestas a estas preguntas:
¿Por qué se programaron tan pocas cirugías?
¿Por qué se cancelaron las cirugías?
¿Por qué se dedica tanto tiempo al recambio?
¿Cuántas veces se repiten estos factores al mes?
Las soluciones pueden ser tan diversas como las causas:
Solución integral para mejorar la eficiencia
La rentabilidad depende de los minutos y los costos.
Aún sí el quirófano mostrará resultados cercanos al 80% del uso bruto del tiempo de trabajo, cabe preguntarse:
¿Qué estamos haciendo bien y podemos mejorar?
¿Qué sobrecostos podemos modificar para obtener más rentabilidad?
Para lograr una maximización del tiempo y la rentabilidad será necesario revisar los procesos. Es probable que al cambiar algunos procedimientos y protocolos se logre un ahorro de costos y de tiempo.
Conocemos muchos casos.
En estos análisis los expertos han encontraron que es posible modificar el inventario y reducir algunos tiempos sin disminuir la calidad del servicio.
Normalmente, este proceso comienza cuando el jefe de quirófanos autoriza una prueba de paquetes quirúrgicos de uso único que sugerimos elegir según la técnica quirúrgica, el tiempo del procedimiento y el volumen estimado de fluidos del paciente.
Las razones para sustentar esta prueba son:
Los Resultados
Después de la experiencia, el equipo quirúrgico y el comité notan que:
El ejercicio empieza a mostrar resultados: en instituciones en las que los indicadores son de alta eficiencia, el equipo logra mejores tiempos de recambio de hasta 40 minutos por día. Además, se observa una reducción del tiempo de alistamiento para cada intervención entre cinco y ocho minutos.
Esos dos cambios abren la posibilidad de realizar una cirugía más cada día, es decir, 250 cirugías más al año.
Reducir tiempo de limpieza y alistamiento = más cirugías
Combinar rentabilidad con más calidad
El análisis integral de la rentabilidad en quirófanos está completo cuando se articulan las variables eficiencia y calidad. La experiencia ha demostrado que una disminución en la calidad puede llevar a un aumento de las infecciones asociadas a la atención sanitaria y un aumento de las IAAS se observa en los mayores gastos y pérdidas.
Así, el uso efectivo del tiempo de quirófano debe incluir los minutos necesarios para un buen protocolo de limpieza que garantice la seguridad del paciente. Las tareas de limpieza son indispensables en la prevención y control de infecciones en sitio quirúrgico y, en consecuencia, impactan favorablemente la capacidad de atención de la institución.
Además, la calidad está asociada a la disminución de riesgos y a una mejor atención al paciente. Un margen de flexibilidad en las demoras por causas médicas, ya sean por mayor tiempo en el quirófano o por tardanza en el ingreso, son recomendables. En ese mismo orden de ideas, la implementación de paquetes quirúrgicos de uso único con miras a mejorar la rentabilidad conlleva simultáneamente a un aumento en la seguridad para el paciente y el personal de la salud.
Conclusión
Es posible mejorar la eficiencia, maximizar la rentabilidad y aumentar el flujo de pacientes sin sacrificar calidad en la atención sanitaria. En efecto, algunos estudios realizados en hospitales nos han demostrado que con los paquetes quirúrgicos de uso único es posible lograr simultáneamente:
Por Katy Schuth B. – Redactora