Actualizado marzo 3 – 2022
Publicado mayo 27 – 2020
El efecto del auto-cuidado
durante el COVID-19
El efecto del
auto-cuidado
durante el COVID-19
Tiempo de lectura:
3 min
En ciertos momentos de la vida, las personas evidenciamos la necesidad de cuidarnos, de tener comportamientos que nos protejan, estar a salvo de agentes externos e internos para mejorar nuestro bienestar.
Aprendemos nuevas conductas.
Por ejemplo, nos protegemos de la radiación solar con protectores solares; de los tóxicos, gérmenes y bacterias con el lavado de las frutas y verduras antes de consumirlas; del daño físico y sicológico con hacer visible la violencia familiar; de la obesidad con el ejercicio; o de la ansiedad con la meditación.
Esto sucede cuando algo o alguien nos enseña que está bien pensar en nosotros mismos, amarnos, y buscar lo mejor para nuestra propia vida.
Auto-cuidado en época de pandemia
El auto-cuidado se entiende como ese especial cuidado que adquirimos sobre nosotros mismos cuando tomamos consciencia de nuestro propio valor, somos capaces de reconocer lo que nos causa daño y aceptamos entonces tomar distancia de lo que causa el mal. En ese momento, podemos modificar hábitos, usar con gusto el equipo de protección personal o reforzar nuestra espiritualidad. Al hacerlo nos volvemos responsables de nuestro bienestar.
Esa es justamente la invitación que se nos hace como individuos en sociedad.
Durante una crisis sanitaria como la causada por un virus respiratorio como el SarsCoV2, el comportamiento de la sociedad, es decir, la suma de individuos, es vital para contener la infección: si la mayoría de las personas atiende las recomendaciones de bioseguridad, la cadena de transmisión se romperá más rápidamente.
En este caso, nos indicaron crear barreras como el uso de los tapabocas y mascarillas y el aislamiento social y la vacunación para evitar la propagación del virus.
¿Lo hicimos bien? ¿Nos auto cuidamos?
Tendencia mundial de cuidado de sí mismo
Desde hace unos años, el bienestar general se ha instalado como una tendencia de salud en el mundo. Las personas quieren estar saludables, consumen alimentos naturales, meditan, utilizan apps para nutrición y ejercicios, y adquieren equipos para medir sus signos vitales.
Durante estos meses, más personas ingresaron a este estilo de vida porque evidenciaron que los pacientes con comorbilidades eran más susceptibles a contraer enfermedad grave por Covid-19, que era difícil conseguir atención médica y que la prevención era una actitud positiva para enfrentar la crisis.
Así mismo, aparecieron nuevas innovaciones tecnológicas y digitales que unieron voluntarios con personas que necesitaban ayuda, que eventualmente pueden modificar la atención en salud: páginas webs, salas de chat, aplicaciones para celulares y grupos especializados en redes sociales(1).
Simultáneamente, se ha observado otro grupo de personas que no se acostumbra a usar el tapabocas correctamente, no desea vacunarse contra el Covid19 y/o ha aumentado de peso durante la pandemia.
También, un relajamiento frente a los protocolos de cuidado, como no guardar la distancia, no asistir a sitios cerrados, no acudir a eventos masivos o no hacer fiestas. Al encontrarse con personas conocidas, se confía en que «se cuidan» y por eso no es necesario ponerse mascarillas. Se prefiere usar un desinfectante antibacterial en lugar de lavarse las manos.
Se percibe un deseo alto de relacionamiento con los amigos, la familia y el entorno como una necesidad de salud mental. Así mismo, en muchas personas una percepción de seguridad frente a la enfermedad por estar vacunado.
Qué esperar del auto-cuidado en pandemia
En general, podemos afirmar que, durante los meses de pandemia, aún en los periodos de aislamiento social, hemos tenido una práctica deficiente de autocuidado.
¿Aprenderemos a auto-cuidarnos? ¿Lo haremos antes de causarnos daño?
La educación sobre los efectos del autocuidado y la formación para aumentar nuestra autoestima serán claves en el futuro. Será posible querer cuidarnos más a nosotros mismos y a los demás si antes completamos estos cuatro prerrequisitos:
Entonces, nos será fácil auto-cuidarnos, tener control sobre nosotros mismos y relacionarnos con el otro para recibir y dar bienestar: Por eso, hoy, durante la pandemia por Covid19 y los brotes de influenza, dengue o gripe, el auto-cuidado es «para el sí mismo», y también «para el otro». Así, usaremos bien los tapabocas o mascarillas para protegernos y proteger al otro; nos lavaremos las manos con frecuencia para evitar contaminar a otros y cuidarnos; y mantendremos la distancia social para prevenir contagios y cuidar al prójimo.
Conclusión
El auto-cuidado exige nuevos comportamientos y autogobierno. Para volverlos habituales, fáciles de vivir, debemos tener conciencia de nuestra propia valía, de nuestro concepto de nosotros mismos y del valor de los otros en la vida. Nuestro compromiso como ciudadanos es aprender los nuevos comportamientos y ser ejemplo para nuestras familias y entornos laborales y sociales. Enseñar a amarnos y amar a los otros será el mejor aprendizaje que podamos recibir.
(1) John Øvretveit, Innovations in self care and close care made during COVID 19 pandemic: a narrative review.
Se puede ver en
https://www.emerald.com/insight/content/doi/10.1108/IJHG-02-2021-0007/full/html
Por Katy Schuth B. – Redactora